X siempre se ha visto envuelta en situaciones absurdas por las que ninguna mujer debería pasar, como la de esta noche. Son las dos de la mañana y X camina por la calle Victoria con B. Mientras caminan, X se detiene cada tanto para marcar algún número de teléfono sin obtener respuesta, sigue con la mirada a B que se ha adelantado hacia uno de los cajeros automáticos. Mira cómo sostiene el cigarrillo en la boca para buscar la cartera en uno de los bolsillos traseros del pantalón. X está enamorada de B. Está dispuesta a luchar por él incluso cuando sabe que B sigue enamorado de su exnovia. Sabe que eso tomará tiempo. Sabe también que no soporta estar sola, por eso sale con A, quien por fin responde a las llamadas de X. Le pide que pase por ella al centro de la ciudad. Se excusa diciendo que la aplicación de Uber está fallando, el cajero automático de su banco está en remodelación y no trae efectivo. Ya te vas a coger, eh , susurra B y le pica las costillas a X, que lleva el brazo haci
Sitio de creación literaria del Seminario de Literatura Francisco José Amparán